Suits de rubber, un Amo bien cabrón, y un pup slave algo rebelde. La nueva propuesta de Hardkinks promete y no decepciona. Para ello cuentan con el holandés Michael Selvaggio y el inglés Kieron Knight, que aterriza en España después de haber trabajado en estudios como Eurocreme, Cazzo, o Blakemason entre otros.

Bondage bien realizado, tortura con electro, múltiples meadas, y sexo en los casi 40 minutos que dura la escena, todo ello en una nave industrial que le viene al pelo a este par de chulos. Si te mola una buena sesión de BDSM no te pierdas esta película.

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